miércoles, 24 de julio de 2013

CUANDO ESTÁ MEJOR VISTO MATAR A UN HOMBRE QUE AMARLO

Ha muerto el boxeador Emile Griffith, aquel púgil que pasó a la historia por llegar a matar en un combate a un rival, en 1962 (además de por su homosexualidad, condición que tuvo que ocultar para seguir siendo un macho químicamente puro sobre el ring).
"Sigo preguntándome lo extraño que es todo esto. Mato a un hombre y la mayoría lo entiende y me perdona. Sin embargo, amo a un hombre y esa misma gente lo considera un pecado imperdonable. Aunque nunca fui a la cárcel, he estado en prisión casi toda mi vida", declaró Griffith alguna vez. Parafraseando a Daniel García Marco (http://www.elmundo.es/elmundodeporte/2013/07/23/masdeporte/1374613437.html), existen ocasiones en las que matar a un hombre es más fácil que amarlo.
Supongo que da que pensar. Si es que todavía hacemos algo parecido a eso en algún momento del día o de la noche, claro...

3 comentarios:

  1. Releyendo la entrada soy consciente de que me hubiese gustado hablar de este caso con Paco, un maravilloso cómplice a quien perdí hace no demasiado tiempo.

    ResponderEliminar
  2. Viene bien aquí el enlace que incluyes en otra entrada.

    http://www.lavanguardia.com/sucesos/20130807/54379256240/muere-torturado-joven-homosexual-rusia.html

    ResponderEliminar