domingo, 9 de octubre de 2011

SÁNCHEZ DRAGÓ, NUEVAMENTE DESDE SU NORIA

Hoy domingo me he dejado los cuartos comprando "El Mundo" (confío en que no tenga efectos secundarios de carácter ideológico; bueno, con los tiempos que corren, seguramente me iría mucho mejor en la vida si los sufriera). Resulta que la portada del Magazine era para Fernando Sánchez Dragó, que publica no sé qué libro de Memorias. El banderín de enganche estaba servido.
Reconozco que Dragó me empalaga e irrita cada vez que le leo algo, pero... sigue enganchándome lo suficiente como para interesarme por dónde anda (no en vano, su sombra hindú y esotérica es la guinda exótica del entramado cultural tradicional del PP: se sale de los manoloescobares, los arturofernándeces, las normaduvales, incluso de los luisalbertodecuencas o juanmanueldepradas).
Leo el reportaje y... lo de siempre. La culpa es mía. Dragó siempre se sube a su noria y... ¡a dar vueltas! Que es un niño de familia bien ("de buena familia", dicen estos siempre), que su padre era como "José Antonio-Presente!", que le gustan las señoritas de buena familia del Barrio de Salamanca, que ha follado mucho y bien, que fue progresista (bajo palabra de honor) y eso le sirve para escribir mil veces lo mismo (lo malos que son comunistas, socialistas, sindicalistas y demás gentes de mal vivir), que si un petardo por aquí, una montaña india por allí, una progre con las piernas abiertas por allá o algún rincón japonés algo más allá. Lo de siempre, me lo tengo merecido. Mientras PedroJetaRamírez (¿será familia mía?) y Esperanza Aguirre le den arilleo, y gente como yo siga prestándole atención... por ahí andará Dragó, girando en su noria.
Hoy me enganchó nuevamente. No escarmiento.

3 comentarios:

  1. Debería aparecerte el espíritu de su gato a ver si aprendes y aprovechas tu tiempo mejor.

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  2. Por cierto, hace varias entradas que el blog no permite hacer comentarios, lo he ido intentando y hoy ha sido la primera vez en bastantes días.
    saludos.

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  3. ¡No me digas, querido Miguel! Y yo con estos pelos... no saber de informática tiene sus problemas. me buscaré al gato de Dragó...
    un abrazo fuerte,

    Antonio

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