Hoy es miércoles, mitad, o casi, de la semana (al menos, de la
laborable), y como hace días que no soy capaz de ver un noticiero, pues
no llego a tiempo a ninguna hora (llego tarde a todo: es mi sino en la
vida), hoy quiero acordarme de todos los cretinos de todos los bandos
habidos y por haber en todas las órbitas, que también son hijos de Dios... Y comprobar que, como aquellos
teólogos del cuento de Borges, ocupan el mismo cuerpo y se necesitan
unos a otros para sobrevivir (como los siameses: no les conviene darse un puñetazo uno al otro, pues irán los dos al suelo, son el mismo cuerpo).
Lo hago con un brevísimo poema.
Feliz miércoles.
Lo hago con un brevísimo poema.
Feliz miércoles.
“Cómo disfrutan
en un bando y en otro
los asesinos”
(Mario Benedetti: “Rincón de Haikus”, 68)
Asesinos
Nada
se parece
más a un asesino de este bando
que
un asesino
del otro bando.
(De
“Poesía a instancia de parte”)
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