Desde el
otro lado del espejo
(Dedicado
a ese incauto que, alguna vez, publicó algo bajo ese título)
Volver al cuarto de baño
y encontrar,
otra vez,
a ese tipo que te mira
desde el otro lado del
espejo
(de ese espejo
convenientemente amaestrado).
Aquí sigue, todavía.
Huésped incómodo.
¡Qué hastío, todavía esa
cara por aquí!
http://www.sur-revista-de-literatura.com/Creaciones07/05Quesada.pdf
¡Me encanta!
ResponderEliminarClara MM
¡Gracias, querida Clara, un abrazo!
ResponderEliminarBueno y ocurrente. En tu linea, personalisimo, aunque, no sé porqué, me recuerda a un poema de nuestro admirado Gil de Biedma..Besos.
ResponderEliminarGracias, querida amiga. Llevo a Gil de Biedma en el ADN, seguro que puede haber alguna influencia. Me lo preguntaré... ¡Abrazos!
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